Exhorta Irma Bolaños a trabajar en favor de grupos prioritarios en Oaxaca
Villa de Zaachila, Oax. 31 de julio 2012 (Quadratín).- Esta Villa celebró en grande la tarde de este lunes, los 50 años de su Lanni Ro Daan Zaadxi -Fiesta grande del Cerro de Zaachila- en su idioma natal, teniendo como escenario la zona arqueológica de este municipio nombrado entre los oriundos como el Cerro Grande. El pueblo entero subió colina arriba, así como decenas de turistas nacionales y extranjeros, con tal de admirar la riqueza prehispánica del corazón del señorío zapoteca.
Bajo un abrasante sol, la joven que representa a la diosa Pitao Ko Xub, realizó su ofrenda como saludo a los cuatro vientos para dar inicio a la magna celebración de Zaachila.
Con los primeros acordes del Dios Nunca muere, a cargo de la Banda de Música Infantil del Internado de Reyes Etla, una a una entraron las delegaciones de las ocho regiones representadas por los nueve barrios de Zaachila, quienes dieron vida al Lanni Ro Daan Zaadxil con sus bailes, vestimenta y tradiciones.
Los habitantes del barrio de Santa María fueron los primeros en representar su tradicional Mayordomía, quienes sorprendieron con la aparición de Los Zancudos, hombres que danzan sobre zancos de madera.
El Barrio San Jacinto se lució con las Chinas Oaxaqueñas: bellas jóvenes que portaron amplias y coloridas faldas, trenzas de colores, con canastas de flores en la cabeza, ejecutando el tradicional Jarabe del Valle.
El barrio de San Sebastián dio vida a la tierra de la sacerdotisa, María Sabina, Huautla de Jiménez, con los sones mazatecos.
El barrio La Purísima trajo la elegancia de la región del Istmo de Tehuantepec con sus mujeres ataviadas con enagua y huipil de terciopelo negro mientras que los caballeros vestidos con blancas filipinas, pañuelo rojo al cuello y el tradicional sombrero charro de 24, interpretaron magistralmente la Sandunga.
San Pablo La Raya ejecutó los sones de la Sierra Mixe; el barrio del Niño llegó con la algarabía de los Sones de Betaza; Lexio dio vida a los sones y jarabes de la Mixteca, Tlaxiaco y Huajuapan de León; la Purísima animó a todos con los acordes de la Llorona de Santo Domingo Tehuantepec; la Soledad ejecutó sones de Santa Catarina Juquila, con la picardía que identifica a la región de la Costa.
En los rostros de los turistas locales y extranjeros se dibujaron sonrisas durante las más de cinco horas que duró la presentación del Lanni Ro Daan Zaadxil. Al final, el público aplaudió de pie a los hombres y mujeres de los barrios zaachileños que participaron en la máxima fiesta de la antigua capital zapoteca.
Los bailarines, representantes de barrios y autoridades municipales, al término de la Guelauetza 2012, se despidieron de los visitantes y anunciaron que ¡el próximo año, Oaxaca y especialmente Zaachila los espera con los brazos abiertos!