Lord Robert Baden Powell: El fundador de los Boy Scouts

✍🏻✍🏻 Apunte diario sobre letras hipnóticas

🐺👑 ‘Impeesa’: ‘El Lobo que nunca duerme’.👑🐺

Lord Robert Baden Powell: El fundador de los Boy Scouts 🐺
Lord Robert Baden Powell, el carismático fundador de los Boy Scouts, fue un joven aristócrata británico que encontró su verdadera pasión en el aire libre y en la naturaleza, al igual que su madre, Henrietta.
A diferencia de su padre, Lord Baden Powell no sentía atracción por los ágapes, los negocios o las tertulias palaciegas.
Prefería explorar, observar los milagros de la naturaleza, acechar animales, cultivar la tierra, acampar en bosques, nadar y cabalgar.
A los 19 años, se unió al cuerpo de caballería del ejército británico y rápidamente demostró habilidades excepcionales en el reconocimiento territorial, la vigilancia, el rastreo, la exploración y la persecución sigilosa. Incluso en tiempos de paz, Lord Baden Powell llevaba a cabo prácticas de campo y se destacaba como un docente innato, compartiendo generosamente sus conocimientos y tácticas. En 1887, fue asignado a África para controlar a las tribus Matabeles, Ashantis y Zulúes.
Aunque enfrentó a estas tribus con valentía, su objetivo principal era aprender sus tácticas y métodos de supervivencia.
Los Zulúes lo acogieron y le dieron el nombre de ‘Impeesa’, que significa ‘Lobo que nunca duerme’.
En 1889, ya como Mayor del ejército, Lord Baden Powell conoció a Frederick Russell Burnham, un héroe de la Segunda Guerra de los Boer.
Burnham había realizado en América lo mismo que Lord Baden Powell en África, relacionándose con los jefes de tribus para aprender sobre sus técnicas de acampada defensiva y vida en el campo.
Juntos, decidieron crear un compendio coherente de estas técnicas y utilizarlo como método de entrenamiento.
Así nació el libro ‘Aids to Scouting’. Lord Baden Powell también se perfeccionó leyendo ‘El arte de los Bosques’ de Ernest Thompson Seton.
Durante sus campañas militares, Lord Baden Powell no veía con buenos ojos la presencia de jóvenes en los frentes de combate.

En cambio, los organizaba y asignaba responsabilidades en la retaguardia, inculcándoles el valor educativo del servicio.
Reconoció la dedicación, el compromiso y el coraje de la juventud. Cuando se enteró de que su libro se había convertido en un éxito de ventas entre los jóvenes fuera del ámbito militar, tomó una decisión trascendental.
En colaboración con Burnham, coordinó la creación de un movimiento juvenil internacional organizado: los Boy Scouts.
Lord Baden Powell sostenía que los jóvenes no solo te escuchan, sino que también te observan. Por eso, predicaba con el ejemplo, viviendo él mismo las experiencias que quería transmitir.
Huyendo de aulas y libros, animaba a los jóvenes a descubrir el conocimiento por sí mismos, alejados de preceptos y patrones establecidos.
Les inculcó el valor de vivir para servir, el patriotismo y el espíritu de superación individual, sin comparaciones.
Además, Lord Baden Powell fue un ferviente defensor del uso de un uniforme para ocultar las diferencias sociales entre los integrantes de los Boy Scouts.
En 1908, se organizó el primer encuentro de los Boy Scouts con tan solo 20 asistentes. Lord Baden Powell y Frederick Russell Burnham, ambos militares y hombres de honor, compartieron el respeto y la admiración de aquellos que se unieron al movimiento del Scoutismo.
Se consultaron mutuamente y se visitaron en numerosas ocasiones.
Lord Baden Powell vivió una vida plena y enriquecedora, pero llegado el momento decidió retirarse junto a su esposa a los valles de Nyeri en Kenia. «Prefiero que la muerte me encuentre en África que en cualquier otro lugar, allí está mi corazón», afirmaba.
El 8 de enero de 1941, Lord Baden Powell dejó este mundo, pero su legado perduró.
En honor a Lord Baden Powell, Frederick Russell Burnham se comprometió a mantener en alto el espíritu Scout hasta el final de sus días, y así lo hizo.
La influencia y el impacto de Lord Baden Powell en la juventud y en el mundo perduran hasta hoy, con millones de Boy Scouts alrededor del mundo comprometidos con los valores de la hermandad, la exploración, el servicio y la superación personal.
Lord Robert Baden Powell, el «Lobo que nunca duerme», dejó una huella imborrable en la historia del movimiento Scout.
Su visión y sus enseñanzas continúan inspirando a jóvenes de todo el mundo a ser ciudadanos responsables, comprometidos con el servicio y la construcción de un mundo mejor.
Con admiración

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Arturo