Economía en sentido contrario: Banamex
Una de las expresiones jocosas, de apremio y en no pocas ocasiones de llamada de atención fuerte, quienes han sido mi pasión y mi condena es cuando el servidor que casi inequívocamente es varón se tarda en destapar y pasar los cartones de cerveza a quienes para ese momento ya están bastante alegres, sudorosas y están a punto de bailar su enésima pieza con su par que es otra paisana por supuesto y que con cerveza en la cabeza presumen de su equilibrio, de su supuesta sobriedad y gritan al unísono vítores al que paga la fiesta, al santo patrón o simplemente para si mismas. Esto que es una de las manifestaciones de costumbre y que salvo la triste historia del amanuense y su paisana desalmada, se celebra y se espera en toda celebración, hoy adquiere tintes trágicos sobre todo con la naturaleza ante el ya casi veinte días en que la importante reserva de la biosfera mundial sufre en una una de sus partes de mayor relevancia en tanto ahora mismo enfrentan la falta de cumplimiento de la resolución de la Corte que sentenció lo que ellos sabían sostenían y defendían como una invasión directa de personas del vecino estado de Chiapas que aunque en su mayoría son indígenas pobres de la región de los Altos, fueron empujados y ubicados por intereses de ganaderos para una vez invadidas las tierras, deforestar y luego sacarlos o que permanezcan como sus peones de sus hatos ganaderos en más de 160 mil hectáreas como si algo hiciera falta.
Al flagelo “natural” que en el momento de escribir esta colaboración sigue vivo amenazando cada día más a las localidades habitadas sobre todo en la zona de Benito Juárez, San Miguel Chimalapa, con el fuego voraz también se avivan las diferencias, los reclamos de los habitantes afectados y las aseveraciones sui géneris de los gobiernos que afirman sobre todo en boletines de prensa que no solo lo están combatiendo sino que casi ya lo extinguen sin que la trágica realidad pueda confirmarlo y todo parece indicar que se podría llegar a una confrontación social y política mayor con indígenas zoques que han sido olvidados y omitidos por los gobiernos de todo tipo. Aunque no sea usted especialista de análisis de medios generoso lector, puede de manera puntual y a la mano leer ahora mismo en diario y portales locales, de circulación nacional y las redes sociales, las dos versiones sobre el mismo desastre en que por una lado las autoridades agrarias y tradicionales de los poblados involucrados aseguran que las dependencias de gobierno responsables han sido omisas o evasivas en todo caso para que el personal comunitario esté cada vez más participativos sin los apoyos mínimos necesario de equipo, agua, víveres, combustible para las sierras, mientras que los boletines oficiales inequívocamente inician señalando el “numeroso” personal que se paga con los impuestos de todos y no es una acción de gracia o de favor, decir que ya falta poco para que se apague ahora con dos estatus de la situación que piensan aminora su responsabilidad entre el avance en extinguir el fuego y el apagamiento total, dejando siempre al final como referencia marginal que “los pobladores también están de alguna manera participando”.
“Claro estamos molestos por tantas mentiras que dicen los del gobierno… desde el 24 de marzo no han ayudado gran cosa para sofocar los incendios… dijeron que tres helicópteros descargaron agua, pero a hora de descargarla no le atinaron a la lumbre y regresó a Zanatepec, dijeron que el centro de mando que ofrecieron instalar en la comunidad de Benito Juárez, que siempre no porque no hay internet en la zona, informaron que se dotaría a la comunidad de pico, palas y rastrillos…pero igual y mintieron porque dijeron que las herramientas no llegaron porque se averió la camioneta, puras mentiras no hubo un acuerdo para construir una helipista, con respecto a que dos personas de la comunidad irían al puesto de mando de Santo Domingo Zanatepec le decimos que nadie irá…no tenemos sueldos y ellos sí…” Todo ello en el mismo diario (El Universal del 12/04/24), aparece en un boletín oficial como que fueron acuerdos y con una foto en donde sobresalen los empleados públicos y omiten a los pobladores que combaten el incendio.
Vi también antes de escribir esta colaboración la respuesta airada, intolerante y hasta amenazante al menos de manera verbal del responsable de la seguridad en el gobierno a pregunta expresa de un reportero sobre los índices oficiales de incremento de la inseguridad, los crímenes, delitos con el argumento ya bastante usado que es culpa de los funcionarios pasados que se suma al ambiente polarizado de manera abierta en que también un representante de una organización social recientemente le respondió a otro reportero que los señalamientos que le hacen es culpa de la prensa: Pareciera que los resultados del 2 de junio vendrán a polarizar aún más este clima con mayores riesgos sociales.
Gerardo Garfias Ruiz [email protected]