
Quiénes somos | Cipriano Miraflores
Oaxaca, Oax. 8 de junio de 2010 (Quadratín).- El gobierno de Oaxaca continuará el proceso de pacificación de la región triqui a través del diálogo con las tres organizaciones, ya que la ayuda humanitaria es necesaria y bienvenida, sin embargo, no resuelve el problema en la región triqui, aseguró esta noche de martes el secretario general de Gobierno, Evencio Nicolás Martínez Ramirez.
En conferencia de prensa, luego de la suspensión de la caravana a San Juan Copala, expuso que el gobierno de Oaxaca dispuso un operativo que distrajo recursos y personal para garantizar la seguridad de quienes acudieron a la zona, sin conocer plenamente la problemática.
Refirió que en el dispositivo participaron 350 elementos de la policía estatal; ambulancias, patrullas, se bloquearon quirófanos y se trasladaron al lugar de la zona titulares de las dependencias responsables de la seguridad de los integrantes de la caravana.
El gobierno del estado dispuso de 350 para la región, tiene un costo para el estado; se distrae y se dispone allá, también nos lleva a distraerlo de sus funciones; el tener seis hospitales disponibles y bloquear quirófanos, un alto costo para la sociedad, señaló el responsable de la política interna.
No obstante, se evitó violencia, no tenemos nada que lamentar, que es lo más importante, se salvaguardó la vida, la seguridad de todos los participantes, reconozco la prudencia, la cordura del diputado Encinas y de todos los actores que participaron en esta decisión, mencionó el secretario general.
Mencionó que este operativo dejó en claro la voluntad del gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz de garantizar la seguridad para todos los integrantes de la caravana.
También dijo que el objetivo de la caravana era llevar ayuda humanitaria, pero es importante precisar que la región triqui no es agencia de San Juan Copala, la región triqui abarca 37 comunidades y todas necesitan apoyo y reclaman atención.
Sin embargo, por muy loable que resulte esta actividad, tiene también, necesariamente que ir acompañada de la prudencia, de la pertinencia de evitar riesgos y no se podía arriesgar ni a la caravana, ni a los policías ni a los diputados federales.
El apoyo a la región triqui debe verse desde una óptica integral para todos, la ayuda humanitaria es bienvenida, pero no resuelve el problema ancestral que se vive en la región triqui, se tiene que conocer y escuchar a todos los actores, recomendó.