Isidoro Yescas / Gobernador: Intención del voto

Oaxaca, Oax. 11 de abril de 2010 (Quadratín).- Un análisis comparativo entre dos encuestas aplicadas durante el mes de marzo, y un sondeo de opinión aplicada en el mismo mes, todos en relación a las preferencias de los oaxaqueños para elegir gobernador, arroja el mismo resultado: quién hasta ahora se mantiene en primer lugar es Gabino Cué Monteagudo con un porcentaje de diferencia sobre Eviel Pérez Magaña que fluctúa entre 9 y 5.9 por ciento.
Del 3 al 6 de marzo, en la etapa previa al inicio de las precampañas, la empresa Parametría encuestó a domicilio a 1,600 oaxaqueños, y los resultados fueron los siguientes: 40 por ciento manifestó que votarían por Gabino Cué, 31 por ciento por Eviel Pérez Magaña y 4 por ciento por Irma Piñeiro (el nombre de la precandidata del PUP, María de los Angeles Abad, no fue incluido).
Como ya es del dominio público, estos resultados, válidos para el momento de su aplicación, pero que como toda encuesta refleja el estado de ánimo de los electores, fue descalificada por el diputado federal Héctor Pablo Ramírez Puga, integrante del estado mayor de la campaña de Pérez Magaña.
El jueves 8 de abril, el periodista Leopoldo Mendívil, dio a conocer los resultados de una encuesta aplicada del 27 al 31 de marzo a 1, 200 oaxaqueños –ya en la última semana de las precampañas de gobernador- por una empresa cuyo nombre no revela pero que asegura goza de alta confiabilidad.
De acuerdo a los resultados de ésta encuesta, el 37.7 por ciento daría su voto al candidato de la Coalición “Unidos por la Paz y el Progreso” contra 31.8 que lo haría por el candidato de la coalición PRI-PVEM.
Sin embargo, en términos de preferencias partidistas, el 41 por ciento de los encuestados declaró su preferencia para votar a favor del PRI-PVEM mientras que el 33.4 por ciento lo haría por los partidos PRD-PAN-PC-PT.
Por su parte, el portal de noticias Quadratín Oaxaca, aplicó durante los 20 días de la precampaña un sondeo de opinión para conocer las preferencias de sus usuarios sobre las dos coaliciones, el PANAL y el PUP con el siguiente resultado: 3,986 votaron por la coalición opositora, 2,911 por la coalición PRI-PVEM, 166 por el PANAL y 80 por el PUP; 257 usuarios no manifestaron preferencia por ninguna fórmula y 121 votaron por un “no sé, no me interesa”.
Conclusiones:
En la encuesta de Parametría GCM aventaja a EPM con un 9 por ciento, mientras que en la citada por Mendívil sigue adelante, pero con una diferencia de 5.9 por ciento.
Medidas las preferencias en función de los partidos coaligados, la segunda encuesta otorga una ventaja de casi 8 por ciento al PRI-PVEM sobre los partidos de la coalición “Unidos por la Paz y el Progreso”, lo que solo confirma que existe un importante sector de priistas que se resisten a aceptar a Pérez Magaña como su candidato a gobernador, pero que se mantienen leales a su partido. Otra lectura del mismo resultado nos permite establecer que el PRI tiene mayor control de su estructura y voto duro que los partidos opositores, sin embargo cuando se trata de definir las preferencias por sus candidatos el sentido del voto priísta se modifica radicalmente, lo que pudiera anticipar que para el 4 de julio EPM capte una menor votación que los candidatos a diputados y las planillas de concejales postulados por el mismo partido.
Si los resultados absolutos de Quadratín Oaxaca los transformamos en porcentajes el 53.8 serían para Cué y el 39.3 para Pérez Magaña. La diferencia de poco más del 14 por ciento se explicaría porque la metodología utilizada para la aplicación de las encuestas es mucho más rigurosa que la aplicada para los sondeos de opinión y, también, porque el universo de usuarios del portal electrónico no necesariamente es representativo de todo el estado de Oaxaca.
Las campañas se inician en mayo y será esta la etapa decisiva para definir las preferencias electorales de los ciudadanos de Oaxaca. Para entonces ya estarán también en posición de arranque los candidatos a diputados locales y las planillas de concejales. Y en un escenario de campañas concurrentes y altamente competidas y competitivas, las indicadores del comportamiento ciudadano y las condiciones políticas de la contienda seguramente se modificarán.
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