Con juegos pirotécnicos concluye edición vespertina de la Guelaguetza

OAXACA, Oax., 17 de julio de 2017.- Con un ambiente festivo y de algarabía concluyó la edición vespertina de la Guelaguetza en el primer Lunes del Cerro.

Sin ningún contratiempo, se desarrolló durante más de cuatro horas esta festividad que da muestra de la multiculturalidad de Oaxaca en la que se reúnen delegaciones de las ocho regiones de la entidad.

Los juegos pirotécnicos marcaron el cierre de la presentación de las delegaciones en la Rotonda de las Azucenas quienes al final en un hermanamiento de los pueblos oaxaqueños, suben todos los participantes para despedirse de los asistentes.

Esta edición estuvo presidida por la Diosa Centéotl, Rebeca Ortiz, acompañada del gobernador Alejandro Murat Hinojosa, y el presidente municipal de Oaxaca de Juárez, José Antonio Hernández Fraguas.

La Flor de Piña y la Danza de la Pluma fueron las presentaciones más aclamadas por el público, además de que se unieron miles de voces para entonar la Canción Mixteca con la delegación de Tlaxiaco.

En esta edición vespertina dieron muestra de su riqueza cultural las delegaciones de San Pedro Amuzgos que presentó un fandango y su festival amuzgeño en el que llevan en procesión a su santo patrono para pedirle que todo sea bueno.

De los Valles Centrales, la delegación de Tlacolula de Matamoros que interpretó el Jarabe del Valle y representó una Mayordomía.

Desde la Cuenca, en la región del Sotavento, llegaron los representantes de San Pedro Ixcatlán, quienes presentaron su Na Puta Chichi.

Santa Catarina Ticuá, de la región Mixteca, presentó parte de la historia de su pueblo a través de danzas y la ofrenda para una boda.

Asimismo, la delegación de Villa Hidalgo Yalalag, localidad de la Sierra Norte, interpretó sus sones y jarabes.

La delegación de Asunción Ixtaltepec rindió un homenaje al compositor nacido en esa localidad de la región del Istmo de Tehuantepec, Jesús ‘Chuy’ Rasgado autor de la canción ‘Naela’.

Con la Canción Mixteca, que presentó la delegación de Tlaxiaco, se unieron miles de voces para interpretar una de las melodías más representativas de Oaxaca.

Desde la tierra de María Sabina y de los hongos alucinógenos, la delegación de Huautla de Jiménez presentó los Sones Mazatecos, donde destacó la belleza de los huipiles que portaron con orgullo las mujeres.

Y llegó uno de los momentos más esperados de la Guelaguetza: la Flor de Piña con la delegación de San Juan Bautista Tuxtepec, cuya coreografía se armoniza perfectamente con la belleza de las mujeres de la región de la Cuenca

Continuó otro de los momentos estelares de los Lunes del Cerro, la Danza de la Pluma interpretada por la delegación de San Bartolo Coyotepec de los Valles Centrales.

Siguieron las delegaciones de Ocotlán de Morelos con su tradicional llevada de guajolote para una boda; el Fandango de Loma Bonita; y los sones y chilenas de la delegación de Santa María Huatulco en la región de la Costa.

Las estampas de una Mayordomía de Santo Domingo Tehuantepec mostraron las formas tradicionales en que celebran sus festividades en la región del Istmo, además de los extraordinarios bordados de los vestidos de gala y su inmortal Sandunga.

Sones y chilenas son parte de la Fiesta Solteca que presentó la delegación de Sola de Vega, tierra del mundialmente famoso mezcal Tobalá, en la que no podía faltar la quema de los toritos.

Para concluir la presentación de las delegaciones en esta edición vespertina de la Guelaguetza, las Chinas Oaxaqueñas interpretaron el Jarabe del Valle.

Los juegos pirotécnicos cerraron esta festividad en la que se busca el hermanamiento de los pueblos a través de las diferentes manifestaciones culturales propia de cada una de las 16 etnias que conviven en le territorio oaxaqueño.