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Juchitán, Oax. 4 de agosto de 2010 (Quadratín).- El padre Alejandro Solalinde Guerra, coordinador en el Sur de la Pastoral de la Movilidad Humana del Episcopado Mexicano y Nancy Maribel García, directora del Centro de Orientación al Migrante de Oaxaca, A.C. (COMI), fueron denunciados por el delito de tráfico de personas con la agravante de transportar a menores.
La denuncia, presentada por funcionarios de la delegación regional del Instituto Nacional de Migración (INM) ante la Procuraduría General de la República (PGR), involucra al prelado, quien se ha destacado por su labor humanitaria a favor de migrantes indocumentados, en hechos ilícitos.
De acuerdo con un documento de fecha 3 de agosto y enviado por Leticia Valderrama, directora ejecutiva de la Dimensión Pastoral de la Movilidad Humana- Área Pastoral Migrantes, a Carlos Garduño Salinas, director general Adjunto de Investigación y Atención a Casos Unidad de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, se expone el intento de criminalizar el trabajo humanitario de atención a personas migrantes en Oaxaca.
En el documento Leticia Valderrama externa su preocupación por la denuncia A.P. PGR/OAX/OAX/III/257-D/2010 presentada por diversos funcionarios de la Delegación Regional del Instituto Nacional de Migración (INM) en Oaxaca en contra del presbítero Alejandro Solalinde Guerra y Nancy Maribel García García por el delito de tráfico de personas con la agravante de transportar a menores.
Lo anterior porque las declaraciones fueron obtenidas de menores de edad sin las garantías judiciales mínimas y criminalizando a la señora Jeimy Celenia Moncada Mejia (madre de los menores) y David Gutiérrez Rivera, quienes actualmente gozan de libertad como se puede observar en la Causa 62/2010.
De acuerdo con otro documento enviado a Santiago Cantón, encargado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, se expone los hechos que llevaron a la INM a interponer la denuncia.
HECHOS
La señora Jeimy Celenia Moncada Mejía, de nacionalidad hondureña, residía en Estados Unidos con su pareja y una hija. Sin embargo decidió ir a Honduras a recoger a sus cuatro hijos menores de edad que vivían con su tía. Al iniciar el viaje, un sobrino le preguntó si podría acompañarlos y aceptó porque lo conocía desde pequeño y tenía la autorización de los padres.
Ingresaron por Tabasco, continuaron su camino por Chiapas, en donde descansaron en la casa del migrante en Arriaga, y siguieron hacia Ixtepec, Oaxaca, en donde descansaron en la Casa del Migrante que dirige el Pbro. Alejandro Solalinde Guerra. En este lugar conocieron al señor David Gutiérrez Rivera, de nacionalidad guatemalteca, quien pidió acompañarla porque ella viajaba sola con sus hijos.
Al intentar subirse al tren, junto con sus niños, los miembros del albergue les recomendaron que viajaran en autobús por el riesgo que tendrían los menores en un viaje tan peligroso y les proporcionaron los datos del Centro de Orientación al Migrante de Oaxaca A.C. (COMI), que dirige Nancy Maribel García García.
Permanecieron dos días en COMI y continuaron su viaje hacia la Ciudad de México. Al llegar a la terminal de autobuses e intentaran subirse al camión número 78 de la línea de peaje, el chofer les quiso cobrar más dinero advirtiéndoles que de no hacerlo los entregaría a migración. La señora Jeimy rechazó la propuesta y sólo vio que el chofer realizaba una llamada por teléfono.
Durante su viaje por la autopista Oaxaca-Cuacnopalan fueron detenidos por funcionarios migratorios en la caseta de peaje número 78 ubicada en San Pablo Huitzo en donde se dirigieron hacia ellos y les preguntaron por sus documentos migratorios. Al no poder comprobar su legal estancia fueron asegurados por migración.
En su estancia en el Instituto Nacional de Migración los funcionarios migratorios le dijeron a la señora Jeimy que los niños con quienes iba habían declarado que no eran sus hijos, sin embargo al preguntarle a su hijo mayor este le contestó que los oficiales de migración les habían manifestado que la señora no era la mamá.
Por tal motivo, todos fueron traslados a las oficinas del INM en donde los funcionarios migratorios hicieron declarar a los menores, sin presencia consular ni persona de confianza, como consta en el expediente DROAX/013/2010, en donde supuestamente los menores argumentaron que Jeimy Celenia Moncada Mejía no era la madre y que fueron aleccionados por el padre para decir que sí.
Los funcionarios que participaron en estos hechos son: Sandra Mirelly Sánchez López, Subdelegada Local, Ángeles Arian Ruiz Villareal, Oficial de Protección a la Infancia y participó como persona de confianza de los menores, y Rigoberto Ramírez García y Oved Jiménez, agentes federales, todos de la Delegación Regional del INM en Oaxaca.
Esta información fue utilizada para que el 20 de abril de 2010 la Delegación del INM en Oaxaca presentara la denuncia ante el Ministerio Público de la federación en contra de la señora Jeimy Celenia Moncada Mejía y David Gutiérrez Rivera por el delito de violación a la Ley General de Población, en su hipótesis de transportar extranjeros indocumentados por el territorio nacional, con el propósito de tráfico, ocultándolos para evadir la revisión migratoria, agravada por llevar menores de edad, previsto y sancionado por el artículo 138 de la Ley General de Población.
Pero ya en las declaraciones de uno de los menores ante el Ministerio Público, que declaró en compañía de una defensora de oficio, de la Defensoría Pública Federal, adscrita a la Delegación Estatal de la P.G.R., reconoce claramente a la señora Jeimy Celenia Moncada Mejía como madre y tía de ellos.
Además el Ministerio Público solicitó el 22 de abril de 2010 la realización de una prueba que permitiera determinar si la señora Jeimy Celenia Moncada Mejia es la madre biológica de los menores en cuestión. Además se destaca que la señora Jeny Soleno Moncada, tía de los menores, señalada en la declaración del INM como la persona que había pagado para su traslado a EEUU, se encuentra residiendo en Honduras y no en Houston, Texas, como lo declaran.
Cabe destacar que en las declaraciones presentadas por los inculpados y los menores ante el Ministerio Público nunca manifiestan que el Pbro. Solalinde los aleccionó para que dijeran que era su mamá.
Por lo que la Dimensión Pastoral de la Movilidad Humana determinó que del expediente y las declaraciones obtenidas de la señora Jeimy Celenia Moncada Mejía, así como de los menores se percibe que hubo una actitud dolosa por parte de los funcionarios mencionados para obtener declaraciones de menores de edad, sin las debidas garantías judiciales.
El 26 de abril de 2010, se decretó el auto de libertad absoluta a favor de Jeimy Celenia Moncada Mejia y David Gutiérrez Rivera por no acreditarse el elemento del delito de tráfico de personas y valorar la omisión de los derechos procesales de los testigos de cargo, menores de edad, como lo establece la causa 62/2010. Posteriormente los menores y la señora Jeimy Celenia fueron repatriados por lugares y fechas diferentes. Los menores se encuentran en Honduras en compañía de su tía y con miembros de la Pastoral de la Movilidad Humana en ese país.
Fotos: Irinero Mújica Arzate / Roselia Chaca